Ometepetl, es un nombre de origen náhuatl compuesto de dos partes: Ome que significa dos y tepetl montaña o cerro, ese es uno de sus principales atractivos de la isla sus dos imponentes volcanes y gran belleza, así como ser un sitio representativo del paso de diversas culturas indígenas por nuestras tierras hasta antes de la llegada de los españoles
Rosa N. Fuertes
De ese período y posterior a éste se conocen muchas historias, entre las más conocidas está la de Chico Largo, personaje de la isla de quien se dice que era brujo, que hizo un pacto con el diablo, que compraba las almas de las personas a las que concedía favores, entre otras versiones.
La historia de Chico largo es quizá la más popular, tanto que está representada en el Museo de Altagracia, también existen historias de duendes, de personas que extrañamente desaparecían en sus bosques, así como muchas otras que aún se cuentan, pero para Horacio Galán, de la Unión de Guías de Ometepe, una de la más bonitas es la leyenda indígena sobre la formación de los volcanes de la majestuosa isla.
Galán nos contó la historia de Ometepetl: Dicen que cuando en la isla existían distintas tribus, sus costumbres no les permitían que se involucraran los grupos, eran muy estrictos, por lo tanto no podían juntarse parejas de un grupo y de otro, pero un día dos jóvenes, Ometepetl y Nagrando se conocieron e inmediatamente se enamoraron, ambos eran de tribus diferentes.
Los jóvenes empezaron a encontrarse a escondidas y así hicieron durante mucho tiempo, pero un día fueron descubiertos y sabiendo que nunca los perdonarían empezaron a huir, siendo perseguidos sin tregua por haber violado las leyes que los regían y por lo que estaban condenados a muerte.
Al fin los jóvenes enamorados se cansaron de tanto huir y como no estaban dispuestos a ser atrapados decidieron quitarse la vida, para eso se cortaron los pulsos y empezaron a desangrarse.
Dicen que el agua del Lago Cocibolca, se formó de la sangre que derramaron los amantes, los volcanes Concepción y Madera se formaron a partir de los pechos de Ometepetl y con el cuerpo de Nagrando, que logró avanzar un poco más, se formó lo que se conoce como la isla de Zapatera, que también está en el hermoso lago nicaragüense.
Como parte del relato Galán nos indica que la historia de Ometepetl y su gran amor es tan bonita que hasta Luis Enrique Mejía la incluyó en su canción Ometepe diciendo: “Moyogalpa y Altagracia son los ojos de esta india que se baña bajo el sol y sus pechos que se miran de San jorge son los volcanes madera y concepción…”
Es cierto, Ometepe es una de las Islas de mayor representación de nuestro bello país, Nicaragua pero debemos conservar nuestros recursos. ancestral
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